Pensar que los animales carecen de sentimientos es un grave error que muchos cometen. Ellos son seres llenos de valores inquebrantables, con una lealtad sorprendente. Es bien triste cuando un animalito es víctima de maltrato, y más cuando se trata de una crueldad que viene de la mano de nada mas y nada menos que de su dueño.
Eso fue lo que le pasó a esta perrita de raza criolla, que desafortunadamente murió de tristeza tras ser abandonada en el aeropuerto de Bucaramanga, en Colombia. Ella esperó el regreso de su dueño durante TREINTA LARGOS DÍAS, ¡pero nunca volvió!.
Durante todo el mes, Nube Viajera, como el personal del aeropuerto bautizo a esta linda perrita, estuvo recorriendo la sala de espera y los pasillos del Aeropuerto Palonegro.
Nube Viajera siempre permaneció en las instalaciones del aeropuerto y los empleados al verla todos los días deambulando por los distintos pasillos, le ofrecieron comida y agua para alimentarla e hidratarla.
Sin embrago, la tristeza y la depresión se apoderaron de ella y fueron mermado sus fuerzas y sus ganas de vivir.
Una de las aerolíneas brindó su apoyo para que esta noble perrita fuera trasladada a la Fundación Protectora de Animales y pudiera recibir la atención y el cuidado necesario.
Alejandro Sontomonte Niño, veterinario de la Fundación, confirmó que el estado de salud de Nube Viajera se deterioró de tal manera que dejó de aceptar la comida por voluntad propia. Su estado era muy crítico. Hubo que hidratarla con suero y administrarle los medicamentos por vía intravenosa para prevenir una gastritis.
Según informó el veterinario, el caso de Nube Viajera no es el primer caso de abandono de una mascota en el aeropuerto de Palonegro. Se tienen registros de abandonos también en la Terminal de Transporte.
El veterinario hace un llamado a las instancias correspondientes sobre la necesidad de crear el Hospital Público Veterinario y un Centro de Bienestar Animal, donde se pueda atender, no solo estos casos de abandono, sino cualquiera que afecte la integridad de los animales y ponga en riesgo su vida.
Lamentablemente, esta noble perrita fue abandonada a su suerte, dejando un vacío tan grande en su alma que se consumió por la tristeza y depresión a pesar de no tener ningún problema físico.
Aunque le administraron los medicamentos para tratar de recuperar la descompensación que presentaba, murió unos días después por la tristeza.
Donde se encuentre la persona que fue dueña de Nube Viajera debe saber que su comportamiento le hizo vivir los peores días de su vida, y aunque no lo merecía, ella le respondió con una lealtad que pagó con su vida… ¡Qué dolor!
Lo que hizo su dueño rompió el corazón de esta perrita, ella no pudo soportar el dolor. Definitivamente es una historia muy triste, compártela con tus amigos y familiares, es importante tener presente que los animales sienten y padecen.