Independiente de la apariencia de las personas, todas son valiosas por igual, esto es algo que a través de los años tuvo que aprender Supatra ‘Natty’ Sasuphan, una niña de Bangkok.
Supatra tiene la enfermedad del “hombre lobo”, lo que ha hecho que todo su cuerpo y su rostro se llene de pelos.
Las cosas no siempre han sido fáciles para ella, pero afortunadamente logró rodearse de personas que son amables y la respetan, como tiene que ser.
“No me siento diferente al resto. He logrado hacer muchos amigos a los que no les importa mi vello y me he rodeado de personas buenas”, comentó Supatra, quien fue nominada como la mujer más peluda del mundo en el libro de los récords de Guinness en 2010.
Y ahora, la joven decidió afeitarse totalmente el vello de la cara, luego de conocer a un chico que le robó el corazón.
Lo que Supatra padece es conocido como el síndrome de Ambras, una enfermedad incurable y bastante inusual. De hecho, se tiene el registro de 50 casos, entre los cuales se encuentra esta joven. Según los expertos, el síndrome de Ambras es producto de una alteración genética y se encuentra documentada desde la Edad Media. Antes solían llamarla “la enfermedad del hombre lobo”.
Generalmente, quienes padecen esta enfermedad se esconden por temor al rechazo y el qué dirán, sin embargo, Supatra ha sido gradualmente aceptada por la sociedad e incluso, tiene muchos amigos y es considerada una de las chicas más populares de su escuela.
A pesar de probar con diversos tratamientos, el vello continúa creciendo en todo su rostro, en brazos, piernas y espalda, ni siquiera el láser ha podido detener el crecimiento.
Hace unos años, Supatra dijo en una entrevista que los niños solían llamarla “cara de mono” pero eso cambió desde que les demostró que no le importaban los malos comentarios que hicieran respecto a ella.
Así como todos los demás, ella también tiene sueños y el más grande es ser médico pues desea cuidar de las personas enfermas y heridas, así como salvar vidas.
Su infancia ha sido como la de cualquier otro niño; baila, canta, juega y hace travesuras. Sin embargo, el futuro de esta joven no está muy claro pues por problemas respiratorios ha sido intervenida en dos ocasiones. Sus fosas nasales sólo tenían un milímetro de ancho, cuando nació tuvo que estar en incubadora para sobrevivir y en total pasó 10 meses en el hospital.
Su padre comentó que ellos no sabían de la situación de su hija hasta que nació.
Conforme Supatra fue creciendo, también lo fue haciendo su cabello y con unas tijeras su madre le ha ayudado a mantenerlo corto.
Actualmente la joven tiene 17 años y revela estar muy feliz pues ha conocido al hombre de su vida y aunque su enfermedad es algo que la acompañará por siempre, ella ha comenzado a afeitarse la cara y el cuerpo aun cuando su futuro esposa la acepta y la ama tal cual es.
En su perfil de Facebook, Supatra muestra lo enamorada que está:
“No sólo eres mi primer amor, eres también el amor de mi vida”.
A pesar de su enfermedad, Supatra continua siendo una joven muy optimista llena de alegría, está muy feliz y llena de fuerza viviendo la vida al lado de un hombre que la ama y la acepta cómo es.
Confiesa sentirse orgullosa de quién y cómo es, y lo único que desea es que la traten como a los demás, pues no se siente diferente al resto.
¿Qué opinas sobre su historia? ¿Conocías esta enfermedad?
Fuente: porquenosemeocurrio