Uno de los mayores avances tecnológicos de la era moderna es poder volar adonde queramos. Sin embargo, los viajes en avión pueden ser bastante estresantes. Tienes que llegar al aeropuerto a tiempo, encontrar tu vuelo, pasar por el chequeo de seguridad y registrarte, para finalmente poder abordar el avión.
Y cuando pasamos por ese calvario, lo último que queremos es que se genere un retraso o una cancelación. Lo que queremos es que todo el proceso transcurra de la forma más ligera posible, ¿verdad?
Cuando finalmente te montas en el avión, ya puedes sentarte y relajarte. Es posible que quieras leer, ver una película o simplemente descansar los ojos. Pero si viajas con niños pequeños, la cosa se puede complicar mucho más.
Muchos niños no están acostumbrados a viajar en avión y se portan mal. Eso es de esperarse, al menos hasta cierto punto. Sin embargo, un caballero publicó el video de un caso extremo: un niño que estaba haciendo una rabieta en pleno vuelo de larga distancia.
El hombre que grabó la alocada crisis infantil se llama Shane Townley. Él iba a bordo de un vuelo desde Alemania hacia los Estados Unidos. Este vuelo en particular era de ocho horas de duración. Obviamente, un viaje tan largo resulta agotador para cualquier persona, sea adulto o niño.
Sin embargo, el trayecto fue todavía peor, ya que uno de los pasajeros era una madre que llevaba consigo a su ruidoso y revoltoso hijo de apenas tres años.
La crisis empezó incluso antes de que el avión despegara.
En el video se puede ver al niño en la parte superior de los asientos. Un poco después podemos escuchar a la madre hablando con una azafata. La mujer había ido a solicitar que encendieran el WiFi más rápido, para así poder distraer a su hijo con un iPad.
El niñito se desahogó corriendo por el pasillo del avión durante un rato. Pero eso solo funcionó por poco tiempo. Rápidamente empezó a gritar, armando un escándalo. Obviamente, eso fue incómodo para todos los pasajeros del avión.
Finalmente, la aeronave aterrizó en Newark, Nueva Jersey. Aunque por instinto todos podemos reaccionar negativamente ante una situación como esta, hay que tener en cuenta algunas cosas. Por un lado, Townley dijo que la madre nunca trató de evitar que el niño se portara mal, pero solamente podemos ver lo que él nos ha transmitido en su grabación.
La aerolínea emitió un comunicado publicado en el diario The Daily Mail, explicando que la tripulación "se esforzó todo el tiempo para aliviar la situación, atendiendo a todos los pasajeros y ayudando a la madre". Insistieron también en que los demás pasajeros del avión se mostraron "comprensivos con la situación".
Townley describió los gritos del niño como "ruidos demoníacos", y dijo que era obvio que el niño era "adicto a la tecnología". Otros comentaristas del video, que ya ha sido visto más de 10 millones de veces, han dicho que el niño podría tener problemas de comportamiento.
Aunque Townley dijo que la situación se mantuvo durante todo el vuelo de ocho horas, el video en sí tiene menos de diez minutos de duración, y no existe suficiente evidencia que ayude a determinar si el niño realmente estuvo gritando las ocho horas completas.
¿Qué opinas del video? ¿Te parece correcto que Townley haya subido el video a Internet? Déjanos tu opinión abajo en los comentarios y comparte esta historia con tus amigos y familiares, para que también participen en el debate.
