1. Ser agradecido
Las personas agradecidas son capaces de apreciar las cosas buenas que tenemos, centrándose en las cosas positivas de la vida, en lugar de lo negativo.
Si eres capaz de sentirte agradecido incluso con las pequeñas cosas de la vida que te hacen feliz, atraerás más de lo mismo. La gratitud crea pensamientos positivos, que a su vez ayuda a expresar las cosas aún mejores.
Enseñe a sus hijos a ser agradecidos:
Recordándoles que hay que decir gracias, sin importar lo pequeño que sea el regalo o favor; al darles un buen ejemplo, les enseñamos tan solo con el acto que nosotros tenemos.
Hay que asegurarse de que saben que el tiempo es precioso y nada debe darse por sentado.
2. Sepa lo que quiere
Saber lo que uno quiere implica el cultivo de uno mismo a través de la reflexión honesta y también abandonar el hábito de ser lo que la gente quiere que seas y no lo que tú verdaderamente quieres ser.
Cuando sabes lo que quieres, se puede concentrar toda la energía en la atracción de estas cosas.
Ayuda a tus niños a conectarse con su verdadero ser:
Al explicarles cómo la publicidad intenta dar forma a su pensamiento
Animándoles a hacer listas o collages con imágenes de sus sueños y metas
Diciendo que ellos son los que mejor saben cuáles son sus propios deseos y necesidades
3. Cualquier cosa es posible
Que creas que todo es posible no significa que creas que las cosas se pueden conseguir fácilmente, sino que implica creer que tu potencial es ilimitado.
Si eres capaz de absorber esta creencia fundamental, te será más fácil silenciar la voz en tu interior que te critica y socava tu confianza y te dice que no puedes alcanzar tus sueños.
Fortalece el poder de la posibilidad de tus hijos:
Contándoles historias inspiradoras (sobre sí mismo, la familia o personajes famosos);
Ayudándoles a hacer planes de cómo van a alcanzar sus objetivos
Dejando claro que tú crees en tu capacidad de tener éxito.
4. Sal de tu zona de confort
Al salir de tu zona de confort, es posible que tengas algo de ansiedad asociada a aventurarse en lo desconocido y estar fuera de la zona de seguridad.
Sin embargo, el logro de tu pleno potencial y el hecho de manifestar tus deseos implica hacer frente a desafíos y si te niegas tendrás que conformarte con la mediocridad.
Enséñale a los niños a no permanecer en su zona de confort:
Dándoles muchas oportunidades para unirse a nuevos clubes o aprender nuevas aficiones
Gracias a su propia voluntad para salir de su zona de confort
Explicando que hay muchas cosas dignas de nuestro valor
5. Visualiza tus sueños y metas
La visualización creativa es el proceso por el cual los que utilizan la ley de la atracción se dan cuenta de sus deseos con gran detalle.
“Ver” cosas positivas de esta manera ayuda a creer que va a crecer realmente la vida que desea, llenando sus deseos con mucha más potencia.
Ayuda a tus hijos con la visualización de todos los días:
Ayudándoles a actuar sobre sus sueños, a través del juego imaginativo
Llevándolos a una visualización creativa de algo que ellos quieran
Animándoles a que dibujen o pinten sus sueños y metas
6. Mantener una actitud positiva y tener pensamientos positivos
Cuando mantenemos un pensamiento positivo, no sólo se tratará de centrarse en las cosas buenas de la vida, sino que también deberemos proyectar y analizar cómo funcionan esas cosas negativas de la vida para afrontar los momentos difíciles.
La negatividad es un gran bloqueo en el que hay utilizar la ley de atracción con eficacia, por lo que debe trabajar con sus niños para eliminar este bloqueo:
Resaltar y discutir los aspectos positivos de sus experiencias desafiantes
Contar historias acerca de cómo se convirtieron en éxitos desafíos
Sugerir a mantener una lista de cosas que aman o encontrar inspiración
7. Acepta tu singularidad
Al abrazar a tu singularidad, aceptas y celebras las partes de ti mismo que te diferencian de los demás.
Este proceso no sólo ayuda a que te conozcas a tí mismo, sino que también permite el cultivo de una buena autoestima (que a su vez hace que sea más fácil atraer a las cosas que te mereces).
Usted puede ayudar a sus hijos a cultivar la auto-aceptación:
La aceptación de su identidad, incluso si difieren dramáticamente de su propio
Elogiarlos por sus peculiaridades
Animándoles a explorar su creatividad a través de la escritura, juegos y arte
