La sabiduría de los indios es asombrosa. Un viejo indio quiso dejarle a su pequeño nieto una enseñanza que le quedara para toda la vida y que marcara su camino.
Una noche se sentó bajo el cielo estrellado y lo invitó a sentarse con él. Le contó anécdotas de su historia que trascendieron y lo convirtieron en el viejo sabio que todos lo consideraban.
Le predijo que le diría algo que lo marcaría para siempre y esta fue la conversación que tuvieron y que seguramente el pequeño nunca olvidó:
– Sabes, en nuestro interior todos tenemos 2 lobos, constantemente ambos tienen una lucha imparable, una pelea tan terrible que no a todas las personas les es fácil lidiar.
– ¿Dos lobos, cómo es eso abuelo? – preguntó el pequeño niño con ingenuidad y asombro.
– Sí, todos en nuestro interior tenemos 2 lobos completamente distintos; uno es malo porque representa a todos los malos sentimientos que pueden existir dentro de un ser humano, la envidia, la ira, la lujuria, los celos, el orgullo, la codicia, el resentimiento, los miedos, la mezquindad, la culpa, el ego, la autocompasión y la arrogancia.
Pero el otro lobo representa todo lo bueno; el amor, la alegría, la esperanza, la generosidad, la paz, la fe, la bondad y la verdad, dijo el sabio indio a su pequeño nieto.
Entonces el pequeño preguntó: “¿y quién es más fuerte abuelo, cuál lobo es el que gana?”
Eso, mi pequeño, depende de cada uno ¿a cuál lobo alimentarías tú?…
¿Qué te parece esta reflexión?
Deja tus comentarios y esperemos que recuerdes esta gran enseñanza para toda la vida.