Además de aliviar los síntomas de la mastitis, con estos remedios naturales podemos seguir amamantando a nuestro bebé sin problema, ya que no son tóxicos para él
La mastitis es una infección del tejido mamario que puede cursar con sensibilidad, dolor y enrojecimiento en una o ambas mamas.
Afecta con frecuencia a las mujeres que están amamantando, aunque, en mínimos casos, puede darse por otros tipos de infecciones no relacionadas con la lactancia.
Puede venir acompañada con malestar general, episodios de fiebre y síntomas similares a los de un resfriado común.
Se produce por una obstrucción de los conductos de la leche, la cual posibilita el crecimiento de bacterias como la Staphylococcus aureus, que consigue ingresar al seno a través del pezón.
Si bien no representa un problema para el bebé, la severidad con que se presenta puede interrumpir la lactancia por las incomodidades que produce en la madre.
Por este motivo, además de atender las recomendaciones médicas, es bueno tener en cuenta algunos tratamientos naturales que ayudan a calmarlo.
En el siguiente espacio te compartimos los 6 mejores para que no dudes en aplicarlos si te enfrentas a este problema.
¡Apunta!
1. Tomillo
Las compresas con infusión de tomillo son una herramienta terapéutica con propiedades antiinflamatorias y antibacterianas que, en conjunto, ayudan a acelerar la curación de la mastitis.
Su aplicación directa disminuye la irritación de los pezones y calma la sensación de dolor y el enrojecimiento.
Ingredientes
1 cucharada de tomillo (15 g)
1 taza de agua (250 ml)
Preparación
Añade una cucharada de tomillo en una taza de agua hirviendo y tápalo.
Deja reposar la bebida 15 o 20 minutos y cuélala.
Modo de uso
Sumerge un paño o compresa en el líquido y aplícalo sobre los senos durante 20 minutos.
Repite el remedio 2 veces al día si lo consideras necesario.
2. Romero
El efecto emoliente y antiséptico del romero puede contribuir a calmar los síntomas causados por la infección en los senos.
Sus propiedades disminuyen la sensibilidad y ayudan a estimular el flujo de la leche para reducir la obstrucción.
Ingredientes
2 cucharadas de romero (30 g)
1 taza de agua (250 ml)
Preparación
Vierte el romero en una taza de agua hirviendo y tapa la bebida.
Deja que repose 20 minutos y cuélala.
Modo de uso
Sumerge una compresa en la infusión y aplícala sobre el seno afectado durante 15 minutos.
Repite su uso 2 o 3 veces al día.
3. Fenogreco
La infusión de fenogreco actúa como un tónico natural para la piel, disminuyendo las grietas, el ardor y otros molestos síntomas que acompañan la mastitis.
Ingredientes
1 cucharada de hojas secas de fenogreco (15 g)
1 taza de agua (250 ml)
Preparación
Añade las hojas de fenogreco en una taza de agua hirviendo y déjalas reposar 10 minutos.
Filtra la bebida y aplícala lo más caliente que la soportes.
Modo de uso
Humedece un paño o toalla con la infusión y aplícala sobre el o los senos afectados durante 20 minutos.
Repite su uso 2 veces al día, hasta curar la infección.
4. Zanahoria y miel
Una mascarilla de uso externo con zanahoria y miel de abejas puede contribuir a reducir el ardor y la sensibilidad en las mamas.
La miel cuenta con un ligero efecto antibiótico que, sobre la piel, puede ayudar a tratar las infecciones.
Ingredientes
1 zanahoria
2 cucharadas de miel (50 g)
Preparación
Procesa una zanahoria en la licuadora hasta obtener una pasta espesa.
Viértala en un recipiente y mézclala con la miel.
Modo de uso
Frota la mascarilla sobre el seno afectado y déjala actuar 20 minutos.
Enjuaga con agua tibia y repite su uso 2 veces al día.
5. Caléndula
Las propiedades antibacterianas, antiinflamatorias y cicatrizantes de la caléndula contribuyen a controlar la infección en los senos para calmar el dolor y prevenir complicaciones.
Ingredientes
2 cucharadas de flores de caléndula (30 g)
1 taza de agua (250 ml)
Preparación
Vierte las flores de caléndula en una taza de agua hirviendo y tapa la bebida.
Cuando repose, cuélala y aplícala.
Modo de uso
Sumerge un paño limpio en la infusión y aplícalo como compresa sobre el seno afectado.
Deja que actúe 20 minutos, enjuaga y repite su uso 3 veces al día.
6. Malva
Los extractos que liberan las hojas de malva en una decocción pueden disminuir la inflamación y el dolor ocasionados por la mastitis.
Esta, tras aplicarse de forma externa, mejora la circulación en el tejido mamario y ayuda a acelerar su recuperación.
Ingredientes
2 cucharadas de hojas de malva (30 g)
1 taza de agua (250 ml)
Preparación
Agrega las hojas de malva en una taza y caliéntala, a fuego bajo, durante 5 minutos.
Tapa la bebida, déjala reposar a temperatura ambiente y, cuando esté apta para su uso, cuélala.
Modo de uso
Humedece un paño con la bebida y frótalo sobre el seno afectado.
Déjalo actuar 20 minutos y limpia la superficie con agua tibia o una toallita húmeda.
La mastitis tiende a presentar algunas complicaciones cuando no se le brinda un tratamiento. Por esto, además de emplear estos remedios, es importante consultar al médico.